-¿QUÉ?- Exclamo dolorida, es inevitable pensar que todavía no siento nada por él.
-Lo que oyes, Soph. Está aquí en la universidad, recuerda que era un año mayor que tú y le concedieron la beca en la universidad de Medicina. Tu ex tiene un don para esto de ser un cerebrito discreto...- Deja la frase en el aire y sale de ella un gran suspiro. Se sienta en el sofá y la película empieza.- Toma Sophie, su número.- Me lanza un papel escrito donde yo tengo el número de Alex.
-Vete guardándolo, no me interesa, Natalie. Paso de todo.- Contesto con lágrimas en los ojos.
-No llores, que ya da igual todo, mi vida.- Las manos de mi mejor amiga me rozan la cara y me dan un beso en la mejilla.- Disfruta de la película, distrito dos, recuerda.
Sonrío y la película empieza, Distrito Dos, Cato y Clove. Mis personajes. El móvil suena y en la pantalla del iPhone pone que Brandon me está llamando. La película se para y cojo el teléfono.
-¡Sophie!.- Exclama la voz del que era mi mejor amigo.
-¡Brandon!- Noto como sonrío y casi puedo notar su sonrisa.
-Estoy aquí, en la ciudad, acuérdate que yo también empiezo ahora una carrera deportiva. Ya tengo dieciocho y tu dieciséis. ENANA.- Grita él.
-Ya te diré yo lo que es enano...- Susurro por lo bajo.- ¿Y dónde vives?- Le pregunto eufórica.
-En el portal 24 de la cuarta avenida en el tercero A, encima de nosotros hay un duplex ocupado por chicas. Creo.- Me informa mientras yo recuerdo que la avenida donde vivimos Natalie y yo es la cuarta y después creo que vivimos en el 24 o puede que en el 25 y esto es un duplex.
-Brandon....- Le digo riendo.- Sube al duplex de arriba y picad.- Le digo y cuelgo.
-¿Qué ocurre Soph?.- me dice ella mientras me siento de nuevo en el sofá.
-Nuevos vecinos.- Comento riendo.
-En fin... Ya contarás por esa boca que dios te dio, so...- El timbre suena y ella se ríe.- Brandon, nuevos vecinos...- Exclama ella riendo.
Me levanto de un salto y abro la puerta. Detrás de ella veo a un chico probablemente más alto que la anterior vez que le vi, moreno y de ojos color miel. Probablemente más corpulento que antes y claramente con su sonrisa. Es al único que veo de los otros dos chicos, sin contar con este.
Salto y me abrazo a él.- Brandon... Brandon... Brandon...- Digo llorando.
-Hola, Sophie, así que vives aquí.- Dice él sonriendo.
-Vivimos.- Corrijo.- Ven Natalie, hay nuevos vecinos.- Le abrazo de nuevo.
-Oh, osea que estas petardas están aquí.- Comenta un chico rubio y alto, californiano y muy familiar.
-¿Nick?- Arqueo una ceja y me paro a mirar al último chico. Rubio de ojos azules, más alto que antes y un poco más corpulento, con gafas de pasta negras nuevas y con unos vaqueros y una camiseta, las vans y una gorra. Sin duda, es Alex.
-Ese mismo, aquí y ahora.- Sonrío y le abrazo.
-Natalie, son ellos.- Mi mejor amiga llega y su vista se para en Brandon, le abraza y espera a hablar con él un rato, después de un rato mira a Alex y hace lo mismo que con Brandon. Y ahora, por último su mirada para en Nick. Se saludan y ambos se ruborizan.- Oh que monos los dos.- Digo sonriendo.
-¿Y a mí no me saludas Sophie Skyes? ¿Ya no te acuerdas de mí?- Me giro y Alex me sonríe.- Me acerco a él y le sonrío, le abrazo. Pero ya no siento el mismo sentimiento, el de sentirme yo o el de quererle más que nada, pero ahora no, ahora es un abrazo frío.- Me alegro de verte.
-Yo también, Alexander.- Le digo riendo y arqueando las cejas.- ¿Queréis entrar? Estamos viendo una película.
-¡Sí! Entrad.- Dice Natalie sonriendo.
Preparo más palomitas. Nick sentado al lado de Natalie, y como siempre, un espacio entre Alex y Brandon. Llevo los cuencos y le volvemos a dar al play. De nuevo me siento entre los dos. Alex se acerca y Brandon también.
-¡Eh! Vale, parad ya. ¿No habéis cambiado un poquito o qué chicos? Que no me voy a liar ni a acostar con ninguno, no tengo esa intención. Ninguno es mi novio, Alex lo fue, Brandon casi y es mi mejor amigo. Así que dejadlo ya, ¿vale? ¡YA! Yo ahora estoy SOLA, S-O-L-A.- Chillo.
-Mmmm, ¿vale?- Dice Alex arqueando las cejas y riendo.
-Está bien, dejadla.- Dice mi mejor amiga.- Estáis super pesados, y sólo conseguiréis lo contrario.- Sonríe y reanuda la película.
Al acabar la película Nick se queda y Brandon se despide de mí.
-Hablamos después, creo que mañana comeremos juntos o algo así, amorcito de mi amor.- Pronuncia esas palabras riendo y con más énfasis que las anteriores. Le abrazo y sale diciendo estas palabras: "I'M THE ONLY ONE PEOPLE". Probablemente le oigo gritar esas palabras hasta que entra en el ascensor y baja.
-Madre mia...- Susurro y recojo la habitación.
Natalie y Nick siguen en el sofá, abrazados. Como si nada hubiese cambiado y como si a Natalie ya no le importase el chico con el que quedó hoy. Pero bueno, yo ahí ya no me meto.
-Soph, nos vamos a dormir.- Me besa en la mejilla y se va.- Te quiero.- Grita y a continuación suena un portazo.
-Así que Médico eh, Alex.- Le digo en tono irónico.
-Así que Bailarina, la verdad no me sorprende.- Me dice abrazándome por la espalda.- Mi pequeña y vulnerable bailarina de Ballet.- Refuerza la palabra "MI" como si le fuese todo por ello.- Te quiero Sophie, te he echado de menos...- Me susurra.
Me doy la vuelta despacio, nunca le olvidé, no pude y no creo que pueda. Así que sólo me dejo llevar, fue mi novio durante aproximadamente un año. Sus labios rozan los míos y eso me hace sonreír.
-Mi chico.- Le susurro al oído.
Subimos las escaleras y cerramos la puerta de mi habitación. Comienzan los besos interminables.